
XIVº United States Grand Prix

El francés François Cevert piloto de la escudería británica Elf Team Tyrrell a los mandos de un Tyrrell 002 - Ford Cosworth fue el vencedor del XIVº United States Grand Prix, un soleado y templado domingo 3 de octubre de 1971 en el trazado neoyorquino del Watkins Glen International, circuito permanente de New York (59 vueltas x 5,44 kms = 320,67 kilómetros), tras partir desde la quinta plaza de la parrilla de salida, a la zaga de su compañero Jackie Stewart, de Emerson Fittipaldi (Lotus), de Denny Hulme (McLaren) y de Clay Regazzoni (Ferrari).

François Cevert, el joven francés, el príncipe de la Fórmula 1,
protegido de Jackie Stewart y Ken Tyrrell, a bordo de su Tyrrell 002 - Ford Cosworth logró su primera victoria en el estirado circuito de Watkins Glen.
Jackie mandó contundentemente en la primera parte de la carrera, pero tuvo que ceder su posición cuando uno de sus neumáticos estalló de forma inesperada.

Jackie pudo defender el segundo puesto, frenando a los rivales de François Cevert.
Dos años más tarde, François perdió la vida en Watkins Glen, induciendo la retirada de su mentor.
De los 29 pilotos que tomaron la salida sólo lograron clasificarse diecisiete (nueve abandonos y tres no clasificados), en una competición, en que tras disputarse 59 vueltas en un circuito de 5,435 kilómetros de recorrido, venció François Cevert, tras haber rodado Jackie Stewart las trece primeras vueltas con un Tyrrell 003 - Ford Cosworth en cabeza.

El Ferrari 312B del piloto belga Jacques Bernard Ickx, que había partido desde la octava plaza de la parrilla de salida, fue el autor de la vuelta rápida (1 minuto 43,47 segundos, a un promedio de 189,09 kmh) fue en la 43ª vuelta cuando marchaba en segunda posición.
Lamentablemente seis vueltas más tarde una inoportuna fuga de aceite llevó a Jacky a abandonar.
Algo mas afortunado, no demasiado, fue su compañero, el helvético Gian-Claudio Giuseppe Regazzon, que tras partir desde la cuarta plaza de la parrilla de salida, finalizó sexto.
Dos pilotos locales, Mario Andretti (Ferrari) y Mark Donohue (McLaren - Ford Cosworth), en principio inscritos en la prueba, optaron finalmente por acudir a otro evento deportivo

El piloto neozelandés Denny Hulme con su McLaren sufrió un accidente en el transcurso de la carrera.
Jackie Stewart fue el más rápido en los entrenamientos (1 minuto 42,642 segundos, a un promedio de 190,624 kmh).
Ese día completaron el pódium el BRM P160 de Joseph Siffert a 40,06 segundos y el March 711 STP - Ford de Ronnie Peterson a 44,07 segundos.

Debut del piloto londinense, de nacionalidad canadiense, John Cannon con un BRM P153 del Team Yardley BRM que tras partir desde la vigesimocuarta plaza de la parrilla de salida, finalizó en la decimocuarta posición a tres vueltas del líder.

... en esta ocasión también realizó su debut el británico Chris Craft (oriundo de Porthleven, Cornwall) con un Brabham BT33 - Ford Cosworth de la Ecurie Evergreen, que le llevó a abandonar en la trigésima vuelta, tras partir desde la 27ª plaza de la parrilla de salida.

Al finalizar la carrera François Cevert se convierte en el primer francés en vencer en un Gran Premio de Fórmula 1 en trece años, desde la victoria de Maurice Trintignant con su Cooper T45 - Climax en las calles de Mónaco.
Fue por tanto un día afortunado para el automovilismo francés, que había encontrado un nuevo héroe.
Merced a su talento y su gran carisma, Cevert sustituye de algún modo a su cuñado Jean-Pierre Beltoise como icono del automovilismo galo.
Un pletórico Jackie Stewart felicitó calurosamente a su amigo que es no solo como su discípulo, sino también como su lógico heredero.
Ken Tyrrell también se mostró satisfecho con la evolución de su pupilo, criticado por la prensa británica un año y medio antes al aterrizar en la formación inglesa con su escasa experiencia. Con ello Cevert finalizó tercero en el campeonato mundial, que era la mejor posición obtenida por un piloto tricolor.

Finalmente destacar el retorno del sueco Karl Joakim Jonas Bonnier y su viejo McLaren M7C, así como el del transalpino Andrea de Adamich al volante del March-Alfa Romeo. Andrea ocupó el puesto de Henri Pescarolo que había reemplazado al británico Mike Beuttler.

En Surtees, la frustrante temporada del germano Rolf Stommelen con los TS9 terminó una carrera antes de tiempo, ya que contrajo una infección dental y no pudo estar presente.
El británico Mike Hailwood ya estaba fichado para conducir el tercer monoplaza, así que John Surtees tuvo una competencia durante los entrenamientos entre Gijs van Lennep y Sam Posey por el monnoplaza de Rolf, y no fue hasta después de las sesiones de calificación que Surtees optara por Sam Posey.
John mismo pilotó el monoplaza de morro ancho y radiador lateral que debutó en el autódromo de Monza denominado TS9B en la siguiente temporada.
La escudería Yardley Team BRM volvió a contar con cinco pilotos inscritos.
El canadiense John Cannon debía alquilar un March para disputar la prueba, pero al no estar disponible, se le ofreció un P153 de BRM, y el austriaco Helmut Marko se quedó con uno de los P160.
Todos los P160, excepto el de Howden Ganley , tenían culatas Mark II.
Pódium:
- François Cevert con su Tyrrell-Ford, en 1:43:52.0.
- Jo Siffert con su BRM, a 40.062s.
- Ronnie Peterson con su March-Ford, a 44.07s.

Vuelta 59 y última: François Cevert gana el Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1, lo que le da a Tyrrell su séptima victoria de la temporada. Siffert termina segundo, mientras que Peterson, tercero, consigue su quinto podio del año. Ganley es cuarto por delante de Stewart y Regazzoni. Hill, Beltoise, Gethin, Hobbs, de Adamich, Amon, Marko, Cannon y Surtees le siguen. Barber, Fittipaldi y Lovely terminan demasiado atrás para clasificarse.
Después de la carrera
François Cevert se convierte en el primer francés en ganar un Gran Premio en trece años, tras la victoria de Maurice Trintignant en Mónaco. Es un día trascendental para el deporte francés, que ha descubierto un nuevo héroe. Gracias a su talento y carisma, Cevert ha reemplazado, en cierto modo, a Jean-Pierre Beltoise como el icono del automovilismo en Francia.
Jackie Stewart felicitó efusivamente a su amigo, quien se perfilaba no solo como su alumno, sino también como su futuro sucesor. Ken Tyrrell y François Guiter también se mostraron satisfechos con el progreso de su protegido, quien había sido objeto de burlas por parte de la prensa inglesa un año y medio antes al llegar a la cuadra con poca experiencia. Cevert también terminó tercero en el campeonato mundial, la mejor posición jamás lograda por un francés.
BRM ocupa el segundo puesto en la clasificación de constructores, tres puntos por delante de March y, aún más importante, de Ferrari, el gran perdedor al final de la temporada. El equipo británico no había alcanzado un nivel tan alto desde la temporada de 1965.
Stewart y los lobos jóvenes
La temporada de 1971 marcó la cúspide de la carrera de Jackie Stewart y la del equipo Tyrrell. El campeón escocés, con este segundo título mundial, se había convertido no solo en una estrella internacional, sino también en un formidable hombre de negocios que supo gestionar y vender su imagen a la perfección. Stewart estaba transformando la imagen del automovilismo, para gran consternación de los puristas nostálgicos de los años 50, quienes lo apreciaban poco.
Sin embargo, una nueva generación comienza a consolidarse al más alto nivel. Está representada por tres hombres: Emerson Fittipaldi, Ronnie Peterson y François Cevert. Tres jóvenes con personalidades y estilos de conducción muy diferentes, pero todos dotados de un talento considerable y sólidas ambiciones.
Muerte de Jo Siffert en Brands-Hatch
Desafortunadamente, 1971 terminó en tragedia. Con el Gran Premio de México cancelado, el RAC y el fabricante de cigarrillos Rothmans organizaron un evento de Fórmula Libre en Brands-Hatch el 24 de octubre, llamado la Carrera de la Victoria del Campeonato Mundial, para celebrar el título mundial de Jackie Stewart. A pesar de la ausencia de los Ferrari y los Matra, la parrilla era de gran calidad. Jo Siffert estuvo allí para complacer a su amigo Stewart y consiguió la pole position al volante de su BRM P160. En la carrera, tras una mala salida, ascendió rápidamente en la clasificación cuando, en la vuelta 15, perdió el control de su coche a gran velocidad. Tras unas impresionantes volteretas, volcó y explotó. Inconsciente en el accidente, Siffert murió asfixiado por los gases de escape. Los servicios de emergencia, demasiado lentos para llegar al lugar, llegaron demasiado tarde para salvarlo. Otra tragedia debido a una falla de seguridad en los circuitos...
Con Jo Siffert, el automovilismo ha perdido a uno de sus grandes campeones. Al igual que su desafortunado compañero de equipo y rival, Pedro Rodríguez, el piloto suizo fue un campeón ecléctico, con igual dominio en monoplazas, prototipos y CanAm. Hombre discreto pero muy combativo, Siffert era un verdadero entusiasta y un brillante empresario que dirigía con tenacidad sus concesionarios entre carreras.
Así termina, una vez más con dolor, una temporada de Fórmula 1.